FRATER España (Fraternidad Cristiana de Personas con Discapacidad) ha celebrado del 5 al 9 de julio en Segovia su encuentro anual y XLIV Asamblea General en Segovia. Han sido unas intensas y fructíferas jornadas de convivencia y de reflexión, con el lema «Reunidos para seguir haciendo caminos de Fraternidad».
El Obispo de Segovia, D. César Franco, acogió en nombre de la Diócesis de Segovia, a los participantes en el encuentro, con la participación de la Coordinadora Europea de la Fraternidad, Liliana López Toledo. También se hicieron presentes en distintos momentos: las presidentas de la HOAC (Hermandad Obrera de Acción Católica), Maru Megina, y de la JEC (Juventud Estudiante Católica), Clara Fernández-Merino. Por viedoconferencia participaron la Presidenta Intercontinental de la Fraternidad, Sonia Martínez, de Guatemala, la Presidenta del Movimiento Rural Cristiano de España, Mari Ángeles Carrascosa y el Presidente nacional de COCEMFE, Anxo Queiruga. Dio por inaugurada la Asamblea, Luis Manuel Romero, secretario de la Comisión de Laicos, Familia y Vida de la Conferencia Episcopal Española.
La Asamblea estuvo precedida de un proceso de debate y discernimiento sobre la misión y tarea de FRATER en el momento actual de la sociedad y de la Iglesia, la cual vive un esperanzador proceso sinodal de búsqueda de nuevos caminos hacia una Iglesia más evangélica y comprometida.
En la Asamblea se revisó la marcha del Movimiento en los años transcurridos y se trazó una hoja de ruta para la próxima etapa. Se insistió en la necesidad de trabajar por una sociedad inclusiva y solidaria y por una Iglesia samaritana y sinodal. Igualmente, se ha valorado la importancia de los equipos de base y la necesidad apremiante de recuperar los procesos de iniciación. Finalmente, la Asamblea planteó que el Equipo General procure una mayor presencia física y continuada en las zonas y diócesis del Estado español.
La Asamblea, a tenor de sus Estatutos, ha renovado la Junta Directiva, el Equipo General, según la terminología de FRATER. La presidenta elegida es Marisol García González, de la Diócesis de Burgos, que afronta con ilusión la nueva responsabilidad. También se ratificó el equipo que le acompañará en la tarea: María Rosa Pedról, de la Diócesis de Solsona, Basi Martín, de la Diócesis de Segovia y Josep María Llusiá, de la Diócesis de Vic; además de proponer a la Conferencia Episcopal al sacerdote Miguel Martínez Antón, De la diócesis de Segovia, como Consiliario General.
En el transcurso de la Asamblea, se produjo una noticia de gran transcendencia, que llenó de satisfacción y alegría a los participantes: el papa Francisco ha designado al presidente saliente, Enrique Alarcón García, de la Diócesis de Albacete, como miembro de pleno derecho del Sínodo de la Iglesia, que se celebrará en Roma, en su primera fase, del 4 al 29 de octubre de este año 2023.
Las personas fraternas participantes en la Asamblea dejan constancia de su sentido agradecimiento al papa Francisco y a los responsables del proceso sinodal, por este nombramiento, que supone una continuidad con la Consulta Especial que se realizó desde el Vaticano, a través del Dicasterio de Laicos, Familia y Vida y la Secretaría del Sínodo, a las personas con discapacidad, las cuales expresaron sus aportaciones a través de cinco personas con discapacidad de todo el mundo, entre las cuales estuvo Enrique Alarcón.
Bajo el lema «Reunidos para seguir haciendo caminos de Fraternidad» la Fraternidad Cristiana de Personas con Discapacidad de España —FRATER España— celebra, desde hoy y hasta el domingo, su encuentro anual y la XLIV Asamblea General de la fraternidad en Segovia.
Representantes de las fraternidades con presencia en 39 Diócesis de nuestro país se dan cita estos días en el hotel Puerta de Segovia de la capital. Aunque los participantes llegaron ayer a la ciudad, es hoy cuando comienza el encuentro anual. Esta mañana tendrá lugar la ponencia de Felipe Bermúdez Suárez (doctor en Teología y miembro de FRATER Fuerteventura) bajo el título «FRATER en el momento actual de la sociedad y la Iglesia, retos y oportunidades». La mañana continuará con un trabajo sobre la ponencia. Ya por la tarde, Juanjo, miembro de FRATER Segovia, ofrecerá un concierto a los asistentes.
Será mañana viernes, 7 de julio, cuando se desarrolle la XLIV Asamblea General Ordinaria. Durante todo el día, los representantes de las fraternidades de las diferentes Diócesis abordarán sus diferentes necesidades. Asimismo, se renovarán los equipos directivos generales. Enrique Alarcón, actual presidente de FRATER España, será relevado en el cargo previsiblemente por Marisol García, presidenta de FRATER Burgos y única candidata a la presidencia.
Tras dos días intensos, el sábado llegará el tiempo de compartir una jornada cultural con una salida para conocer los lugares más emblemáticos de la capital y culminar la jornada con una fiesta fraterna. Ya el domingo, a las 10 horas tendrá lugar la Eucaristía de clausura y, tras la comida, cada participante regresará a su Diócesis de origen.
Se da la circunstancia de que este encuentro y esta asamblea se celebran en nuestra ciudad precisamente cuando FRATER Segovia celebra su 50+3 aniversario. Un evento que sirve de espaldarazo a la acción social, reivindicativa y espiritual que la fraternidad ha desarrollado y continúa emprendiendo en nuestra Diócesis.
Integrada en FRATER España, movimiento cristiano implantado en cuatro continentes y extendido por 39 Diócesis de nuestro país y con más de 5 000 miembros. Desde que iniciara su andadura en 1957 se ha integrado en el apostolado seglar, siendo sus componentes miembros vivos de una Iglesia que es expresión del Pueblo de Dios, especialmente entre aquellos que tienen una discapacidad y/o enfermedad grave.
La FRATER vive intensamente su misión evangelizadora y transformadora de la realidad en comunión eclesial. Además, junto al resto de colectivos de personas con discapacidad, lucha para seguir logrando una sociedad que sea cada vez más justa e inclusiva, buscando siempre que tanto en la legislación como en la acción social de las instituciones se trabaje en la igualdad de oportunidades para ser ciudadanos de pleno derecho.
Hace más de una década, Nieves Rodríguez acudía como voluntaria en las peregrinaciones al Santuario de Nuestra Señora de Lourdes, en Francia. Más tarde, consiguió convencer a Juanjo Martín, quien, después de peregrinar junto a los hermanos de Palencia, le propuso fundar una Hospitalidad en nuestra Diócesis.
Con mucho trabajo y empeño, pero sobre todo con mucha fe, Nieves y Juanjo son hoy presidenta y vicepresidente de la Hospitalidad Diocesana de Nuestra Señora de Lourdes. Ambos recuerdan con cariño y nostalgia esos primeros momentos, incluso la presentación que el padre Teótimo hizo en Lourdes con motivo de la reciente creación de la entidad diocesana.
Desde entonces, han peregrinado a Lourdes con enfermos cada año, excepto los que no pudieron organizar por motivos de la pandemia sanitaria a causa del Covid-19. Este año han decidido retomar la peregrinación, que cumple su octava edición. Bajo el lema «Vaya a decir a los sacerdotes que se construya aquí una capilla», la peregrinación partirá hacia el santuario mariano el próximo 1 de agosto. Allí permanecerán, compartiendo experiencias al abrigo de la Virgen, hasta el día 5 de agosto.
Tras ese parón “obligado” por la situación sanitaria, la expectativa era tal con esta peregrinación que, nada más abrirse la inscripción, se llenó el cupo de plazas disponible, sesenta. No obstante, aquellos que quieran inscribirse podrán hacerlo en el turno de reserva por si alguna plaza quedase finalmente disponible.
Nieves y Juanjo han sido los encargados de presentar esta peregrinación junto a dos voluntarios de la Hospitalidad: Nieves Martín y Konstantin Milchev. Nieves, trabajadora del ámbito sanitario, ya ha visitado anteriormente el santuario junto a sus padres, un lugar que le transmite una gran paz y serenidad. «Siempre digo que, si pudiera, me traería un trocito de la gruta a Segovia para poder estar allí siempre», ha asegurado.
Para ella esta peregrinación será especial, puesto que por primera vez no podrá viajar con su padre, recientemente fallecido. «Él me preguntaba si podría ir a la próxima peregrinación. Sé que, aunque de otra manera, nos acompañará en este viaje a mi madre y a mí», ha afirmado emocionada.
Una emoción que también ha transmitido Konstantin, el más joven de los voluntarios de la Hospitalidad que «cuenta los días» para poder vivir esta experiencia de fe y fraternidad junto al resto de peregrinos, voluntarios y enfermos.
La presidenta de la entidad diocesana ha recordado que cada enfermo irá acompañado por un voluntario —todos ellos reciben una formación previa para garantizar su atención— ya que su bienestar es lo primordial en este viaje en el que «lo que recibimos nos agranda el corazón», ha asegurado Nieves para recomendar a quienes vayan a Lourdes que lleven su mochila vacía porque «volverá llena experiencias y cosas buenas para seguir viviendo aquí».
Para aquellos enfermos que no puedan viajar, o las personas que por diversos motivos no puedan unirse a la peregrinación, las diferentes celebraciones de las que participe la Hospitalidad diocesana en el Santuario de Lourdes serán retransmitidas a través de su canal de YouTube: Hospitalidad de Lourdes Segovia.
La Hospitalidad Diocesana de Nuestra Señora de Lourdes está formada por voluntarios que, provenientes de diferentes ámbitos y de diferentes edades, se preocupan por atender a enfermos y a sus cuidadores.
A lo largo del año atienden a quienes están en sus casas, en el hospital o en residencias, así como a los familiares de todos ellos, porque, como asegura Nieves Rodríguez «el cuidador necesita estar atendido para poder cuidar mejor al enfermo». Asimismo, se ocupan de que todo aquel que lo solicite pueda recibir la Unción de Enfermos de manera adecuada.
En definitiva, una labor desinteresada por atender a quienes tienen sus capacidades mermadas con el amor sustentado en la fe en Nuestra Señora de Lourdes.
Puedes consultar y descargar aquí el tríptico informativo de la peregrinación
El Obispo de Segovia, Mons. César A. Franco, ha realizado nuevos cambios en la organización diocesana. Son los siguientes:
Arciprestazgo Abades-Villacastín
Arciprestazgo Ayllón-Riaza
Arciprestazgo Cantalejo-Fuentidueña
Arciprestazgo Coca-Santa María
Arciprestazgo Cuéllar
*De este Arciprestazgo salen Fernando Mateo, Álvaro Marín, Jaime Marulanda y Carlos Miguel García Nieto.
Arciprestazgo Fuentepelayo
Arciprestazgo La Granja-San Medel
Arciprestazgo Segovia
Arciprestazgo Sepúlveda-Pedraza
La efectividad de estos cambios tendrá lugar una vez que cada uno de los sacerdotes tome posesión de su cargo. Asimismo, en los próximos meses se irán completando los nombramientos para una adecuación efectiva de las parroquias a sus necesidades pastorales.
Como actividad unida al Tiempo de la Creación, la Diócesis de Segovia ha convocado este curso, por tercera edición consecutiva, el Concurso de Fotografía Tiempo de la Creación. Bajo el lema «DESDE QUE SALE EL SOL, HASTA SU OCASO», el objetivo se puso en admirar la belleza de la creación y prestarla atención, captar sus detalles y concienciar de que, el cuidado de la Creación es responsabilidad de todos, centrándonos este año en la estrella que nos da luz y vida.
La finalidad que se persigue desde la Diócesis es que los participantes en este concurso, a través de las fotografías que han presentado, muestren la concienciación, sensibilización y actuación de la sociedad en la protección de nuestro ecosistema. Todo ello en aras de la protección del entorno (ya sea el medio natural, rural o urbano) y de promover actitudes que favorezcan un buen uso de los recursos naturales.
En definitiva, desde la Diócesis de Segovia queremos, con proyectos como este concurso de fotografía, contribuir al desarrollo sostenible y solidario de nuestra provincia.
La última fase de este concurso tiene lugar una vez realizado el fallo del mismo y la selección de los trabajos premiados. Es entonces cuando se lleva a cabo la exposición de las fotografías ganadoras en cada categoría, junto al resto de imágenes presentadas a concurso. En esta ocasión, y como apoyo a la exposición diocesana sobre el concurso de fotografía, se exhibirá una selección de obras pertenecientes a diferentes parroquias de la Diócesis, el Palacio Episcopal y la S.I. Catedral.
En la primera sala, el visitante podrá contemplar la primera creación con imágenes del Antiguo Testamento y, en segunda instancia, las imágenes místicas y futurísticas que cantan las maravillas de la Creación. En todos los casos, el entorno natural pone música al canto de las criaturas, al Magníficat y al trinar de las aves que planean el desierto del Duratón.
A continuación, en una segunda sala, podrá contemplarse el camino del emigrante y refugiado en la huida a Egipto; la amistad en la relación con Juan Bautista; el agua y la satisfacción de la sed en el Bautismo de Jesús; el cuidado de las ovejas y de los seres vivientes en el Buen Pastor; y la fuerza del fuego y la luz que fortalece a los hombre en Pentecostés.
La exposición se inaugurará este próximo sábado 1 de julio con la entrega de premios del III Concurso de Fotografía. Desde entonces, permanecerá abierta hasta el próximo 31 de julio en la Sala de las Caballerizas del Torreón de Lozoya en el siguiente horario de visitas:
Tardes de domingo y lunes, cerrado.
Desde el equipo organizador del concurso y la exposición agradecen a la Fundación Torreón de Lozoya su disposición y las facilidades ofrecidas para albergar esta exposición tan relevante para la Diócesis.
En cumplimiento de las bases del III Concurso de Fotografía Tiempo de la Creación, este lunes 19 de junio se produjo la reunión del jurado —formado por Jesús Riaza, Ángel Camarero, Rafael Montojo y Mayte París— para fallar los premiados de este concurso organizado por la Diócesis de Segovia. En esta ocasión, los trabajos presentados han girado en torno al lema «Desde que sale el sol, hasta su ocaso», y los premios han recaído en:
Categoría infantil: Marco Llorente por «La estrella que me acompaña en el viaje»
Categoría juvenil: Alba Olea por «Rayo de luz»
Categoría adulta: Laura Herranz por «Una vida dedicada a la creación»
La entrega de premios tendrá lugar el próximo sábado 1 de julio a las 17.30 horas en la Sala de Caballerizas del Torreón de Lozoya. El Obispo de la Diócesis, Mons. César Franco, será el encargado de hacer entrega de los reconocimientos a los ganadores.
Lo hará en un acto que servirá también para inaugurar una exposición en la que, además de las fotografías premiadas y las demás presentadas a concurso, se podrá contemplar una selección de obras pertenecientes a diferentes iglesias de la capital y la provincia, la Catedral y el Palacio Episcopal. Esta muestra podrá visitarse desde el propio día 1 de julio hasta el día 31 del mismo mes.
La exposición de los trabajos presentados a concurso nos enseña a ver detrás de las imágenes la grandeza de la creación, el ingenio del ser humano y la belleza del entramado de colores. Especialmente, aprenderemos a respetar todo lo creado.
El domingo 11 de junio Segovia volverá a vestirse de fiesta para conmemorar la Solemnidad del Corpus Christi, acontecimiento religioso de singular relieve por ser el propio Jesús Sacramentado el que sale a la calle.
Solemnidad que se celebrará con una Eucaristía preparada con todo detalle, en la que se da un especial protagonismo a los niños que este año han recibido a Jesús en su Primera Comunión. La Santa Misa, presidida por el pastor de la Diócesis, Mons. César Franco, tendrá lugar a las once de la mañana en «la iglesia madre», la S.I. Catedral.
Tras la celebración eucarística, la procesión con la custodia saldrá de la Catedral en torno a las 12.15 horas para recorrer las calles del centro de la capital. El Santísimo Sacramento irá custodiado en un ostensorio que data de 1540, en el carro triunfal de madera que, aunque recientemente restaurado, se remonta a 1740.
Este año el recorrido volverá a ser el mismo del año pasado, con la intención de poner de relieve el sentido religioso de la procesión y que los lugares por los que transite tengan relevancia.
De esta forma, se mantienen los cuatro altares en las iglesias de San Miguel, el Seminario diocesano, San Martín y el convento del Corpus Christi, con protagonismo de las hermanas Clarisas que lo habitan.
La procesión dará comienzo con la carroza saliendo de la Catedral, acompañada de los niños de Comunión y sus catequistas. Un cortejo que comenzará con la presencia del grupo a caballo, las cruces y banderas de la Catedral y la banda de la Hermandad de la Soledad Dolorosa de Santa Eulalia. Asimismo, en la procesión estarán presentes las cofradías penitenciales y eucarísticas.
Desde 2019 se incluyó también la presencia de Cáritas Diocesana, con un papel importante ya que el día del Corpus se celebra el Día de la Caridad. De hecho, son ellos los que cortan y esparcen por las calles el cantueso tan típico de esta festividad. Como novedad, se contará con representación de la Hospitalidad diocesana de Nuestra Señora de Lourdes y del Capítulo de Caballeros y Damas de la Reina Isabel la Católica. Con presencia también de las Órdenes de caballeros y damas que fomentan la caridad, así como de los alumnos de la Academia de Artillería, que escoltarán la custodia del Santísimo.
Finalmente, desde la organización se invita a los residentes de las zonas por las que pase la procesión a engalanar los balcones para celebrar un día «para adorar a Jesús, presente en la Eucaristía; alabar con nuestros cantos; y dar gracias a Dios por tantas cosas que tenemos a nuestro alrededor».
La solemnidad de Pentecostés con la venida del Espíritu Santo clausura el tiempo de Pascua e inicia lo que se ha dado en llamar «tiempo del Espíritu» o «tiempo de la Iglesia». La historia de la salvación está dividida en tres etapas: la primera, desde la creación hasta la encarnación, tiene por protagonista al Padre; la segunda, desde la encarnación a pentecostés, es el tiempo del Hijo; y, desde entonces hasta el fin de la historia, el Espíritu Santo dirige la barca de la Iglesia. Naturalmente, el hecho de que cada etapa se adjudique a una de las tres personas de la Trinidad no significa que actúen por separado pues en la salvación todos actúan en plena armonía y comunión.
Al partir de este mundo, Jesús dice a sus apóstoles que les enviará desde el Padre al Espíritu Santo, y esto sucede en Pentecostés. Quizás sorprenda a los lectores del Evangelio de Juan que sitúe la donación del Espíritu Santo a los apóstoles el mismo día de la resurrección, tal como se proclama en la liturgia de este domingo. Jesús, en efecto, se aparece a los Doce al anochecer de aquel día y, mediante el gesto de soplar sobre ellos, les otorga el Espíritu Santo con la capacidad de perdonar los pecados. La acción de soplar recuerda lo que hizo Dios al crear a Adán, cuando sopló sobre él para darle vida. Jesús exhala su aliento para otorgar la nueva vida que trae. Al describir este gesto de Jesús, el evangelista quiere decir que con la resurrección de Jesús el Espíritu es comunicado a los suyos, aunque sea en Pentecostés cuando se manifieste sobre toda la Iglesia, reunida con María, de forma solemne y portentosa.
En la aparición de Jesús resucitado en la escena que acabo de comentar hay tres palabras que definen los dones que trae Jesús resucitado: paz, alegría y perdón. El saludo de Jesús, “paz a vosotros”, significa la plenitud de los dones mesiánicos. Además de ser el saludo normal entre judíos, la paz de Jesús representa, en este caso, la llegada del tiempo definitivo, cuya nota distintiva es la paz. La alegría que experimentan los apóstoles «al ver al Señor» es también el signo de los tiempos nuevos: una alegría que, según Jesús, nadie les podrá arrebatar. Es la alegría de saberse salvados y amados por Dios. Finalmente, el perdón de los pecados, relacionado con la paz, revela que Dios ha establecido una alianza definitiva con el hombre a través de la muerte y resurrección de Jesús.
Todo esto es Pentecostés. Y todo esto es obra del Espíritu que actúa como admirable constructor de la Iglesia. En el relato de los Hechos de los Apóstoles que lee hoy la Iglesia en la liturgia, se dice, además, que los apóstoles estaban reunidos «en un mismo lugar» con María, la madre de Jesús, algunas mujeres y con sus hermanos. Es la Iglesia en su variada composición. La expresión «en un mismo lugar» no se entiende solo como referencia a un sitio físico, sino a la comunidad establecida por la oración común. El Espíritu, al descender sobre la comunidad, la constituye en «católica», es decir, universal. De ahí que pueda expresarse en todas las lenguas, de forma que todos los hombres puedan escuchar el evangelio «en su propia lengua». La confusión generada en Babel desaparece en Pentecostés con el Espíritu de unidad, gracias al cual, cada cristiano puede decir, como afirma san Pablo, que «Jesús es Señor», el Resucitado, y anunciar a los demás la salvación.
Al preparar el sínodo sobre la sinodalidad, esta fiesta nos ayuda a entender el verdadero sentido de esta palabra. Sínodo significa «caminar con» otros. Esto solo es posible si nos dejamos llenar del Espíritu que infunde en la Iglesia el conocimiento de Dios y nos permite confesar con alegría la fe al mundo de hoy.